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Restos de una leyenda de las rutas
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Sin duda alguna, los micros Volvo carrozados por Establecimientos Metalúrgicos San Isidro (E.M.S.I.) fueron legendarios en su tiempo. Buena parte de las empresas de primer orden contaron con ellos en sus flotas y tuvieron una larga sobrevida en otras más pequeñas que los compraban de segunda mano o como transporte escolar o de personal.
Da pena que no haya ninguno preservado y encontrarse con ejemplares sobrevivientes como este, por los que nada se puede hacer. El deterioro es insalvable.
Fue fotografiado en la localidad bonaerense de Huanguelén y perteneció al club atlético homónimo que lo utilizó para sus propios traslados. Finalmente, este pobre Volvo haya "muerto" en la ciudad en la que trabajó.
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“Del viejo “Camino de los Chilenos”, al “Camino del Hilo”
Lucero del Alba, es la castellanización de la palabra Mapudungun, “Huanguelén”, una pequeña localidad enclavada entre los partidos de Adolfo Alsina y Guaminí, cuyo acceso a la RP Nro. 60, los enlaza hacia el oeste, con Carhué y la vecina provincia de La Pampa, y al este con la Autovía Nro. 2 y el Partido de la Costa. Originalmente esta ruta llevó el nombre de Camino de los Chilenos, dado que por allí ingresaban los malones desde Chile, y en el año 1877, con llagada de los fortines y del telégrafo, cambio su nombre a Camino del Hilo, en alusión a este último.
Huanguelén, tierra natal de “El Pampa”, José Teodoro Larralde Saad, más conocido como José Larralde, conoció de malones y de historia, la misma que conformaron sus pioneros, entre ellos la primera línea de transporte de pasajeros, creada por Mario Scavuzzo y Sebastián Salas, “El Veloz”, que posteriormente cambiara su razón social por “El Milagro”.
Quien enseñe lo aprendido, aprende por enseñar.
Quien se larga a caminar. y quien camina hace rato,
no ha de importarle el zapato. por más que duela al andar.
Reciban Uds., todo mi respeto.
A la orilla del juncal
con media brazada alcanza
pa´verle brillar la panza
al bagre mas colosal…
Forasteriando
Parece ser que a “La Aceituna”, tal su nombre, le ocurrió algo parecido… una pena, pues la restauración le sentaba muy bien.
Este móvil no perteneció a “El Milagro”, sino que era el transporte propio utilizado para sus deportistas por el Club Atlético Huanguelén, fundado el 12/03/1928.
Fue restaurado a comienzos de los años 90`s, en los talleres de EMEL, terminado y pintado en el taller del Sr. Julio Kruger, (1992) con los colores del club, verde inglés, negro a la altura de las ventanillas y blanco el techo. Con respecto a la publicidad que lucía se puede observar que está muy envejecida, solo conserva el logo de “La Oleaginosa de Huanguelén - L.H.O.”, productora del aceite de girasol y el detergente sintético simple marcas «L.H.O.», desaparecida en el año 2004.
Había reemplazado a un viejo Chevrolet modelo 1937 con carrocería desconocida, que cumplió una importante trayectoria al servicio del club huanguelense.
Reciban Uds., tod9o mi respeto.