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Línea 76 - Uno de sus "bichos raros"
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Los Bedford carrozados por De Ridder no fueron muy abundantes, por lo tanto encontrar la foto de uno en servicio es casi para festejar.
De raro diseño, llamaba la atención el vano de las ventanillas, que en realidad era uno solo dentro del cual se dividían los diferentes cerramientos. La falta de parantes hizo que su resistencia estructural fuera muy mala y la mayoría se descangalló al poco tiempo.
Aquí vemos uno al servicio de la línea 76, mientras intenta cruzar una inundación en Villa Crespo.
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De Ridder era concesionario de General Motors.
Respecto al 13, solo hice menciòn por el tema de que el de la foto, el de la 223 y el de la 8 eran interno 13, y coincido con vos que era un desastre, ahora que coche que no fuera La Uniòn, Ala, Caseros, Mitre y quizas el Incamet se aguantaba el empedrado de El Cano, Garmendia, Paz Soldan, Donato Alvarez, Yerua, Warnes, Chorroarin y Av. San Martìn, sin desarmarse en el intento?
Alejandro, foto de un Berlingieri, hay en busarg?
Con respecto a lo que denominas "vano", lo cual no es inexacto, en el léxico técnico del transporte, se identifica frecuentemente como "pórtico". Se trata de la distancia que media entre dos parantes o columnas y, por ende, la medida que establece la longitud de cada una de las ventanas.
Acerca de lo que llamas "paloma", debo confesar que recién me entero de esa denominación. Tu comentario me permite deducir que te refieres a los tubos metálicos que conforman la base de la carrocería, cruzando la misma transversalmente e inmediatamente apoyados sobre los largueros del chasis. En la industria carrocera se denominan habitualmente "teleras". Es conveniente señalar que esto se da sólo en las estructuras de carrocerías urbanas, pero no en las de media/larga distancia y turismo, ya que en estas últimas el piso de la carrocería se eleva varios centímetros sobre el chasis para aumentar la capacidad de las bodegas inferiores.
En una carrocería urbana, apoyada sobre teleras directamente al bastidor, la jaula espacial conformada por tubos metálicos reticulados trabaja como un conjunto. Por lo tanto, soporta en buena parte los esfuerzos a que está sometido el vehículo, tanto por su propio peso (estáticos) como al rodar (dinámicos).
Los parantes soportan el peso del techo y descargan estas fuerzas al chasis. Es interesante puntualizar que en las carrocerías montadas sobre teleras, la jaula estructural se abulona -o debería abulonarse- al chasis, manteniendo por esta condición una cierta independencia del mismo. En este caso el chasis soporta una parte muy importante de los esfuerzos, de ahí sunecesaria robustez constructiva (son perfiles de acero de sección "U" de cerca de 8 mm de espesor, conformados por laminación en caliente). Por esta razón dicha modalidad de fabricación se aplica también para aquellos vehículos que deben transitar por caminos irregulares, donde el vehículo tiene que ofrecer la mayor robustez.