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En 1972, poco después de este modelo, La Porteña comenzó a producir -y estimo que por breve tiempo- otro con más bombés y ventanas de pequeño tamaño. Creo que fue una evidente involución desde lo estético-formal. El referido taller carrocero ya transitaba su largo ocaso....

¿Qué tal salieron de calidad los productos de esta carrocera en esa época, Roberto? Alguna vez me contaste que su calidad decayó gradualmente, pero no sé o no recuerdo cuando se inició su caída.

Ése pequeño ventilete, era móvil?

Parece que sí, Gastón. Veo dos bisagras.

En cuanto a la calidad constructiva, diferenciaría lo que es resistencia estructural, que siempre en los productos elaborados por La Porteña -y después, también por Colonnese S.A.I.C.A. fueron muy débiles- de lo que es terminaciones. En cuando a esto último, creo que se destacaron en general por su buen gusto y detalles.

El ocaso de La Porteña, presumo que comenzó cuando Cilio Colonnese se escindió en la sociedad que tuvo desde mediados de los 40 con Silvio Mordasini. Ello aconteció en 1967, aunque sus efectos pudieron, tal vez, comenzar a mostrarse a inicios de los 70. Es claro que la penetración en el mercado de La Porteña a partir de esa época, es decir: 1971-1972 y en adelante, disminuyó sensiblemente hasta desaparecer a mediados de esa década en el carrozado de ómnibus.

Para concluir y atendiendo a la inquietud de Gastón, esos diminutos ventiletes poseían apertura, rebatiéndolos hacia fuera con un dispositivo de trabado interior para que no se movieran en la posición seleccionada de apertura.

Gracias por las respuestas.
Además parece tener otro ventilete más en la ventana de la puerta izquierda. Es asi?

Correcto, Gastón. Ese ventilete en general siempre lo equiparon los productos mendocinos. Por el lado interno poseía dos mariposas, una en su parte superior y otra en la anterior que, al aflojarlas, permitía abrir el ventilete que pivotaba sobre un eje ubicado en su parte posterior.