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"Sapito" santafesino para jugar un rato
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Esta imagen nos muestra un clásico Chevrolet "Sapo" perteneciente a la línea 18 de la ciudad de Santa Fe, por aquellos años explotada por la Empresa Santa Fe. Obsérvese, en el medio de la razón social pintada en gótica en el lateral, el mapita de la provincia, que sirve como para reforzar el "sentimiento de pertenencia" al lugar de donde la empresa era oriunda.
Este coche era propicio para jugar un rato y adivinar su carrocería y los amigos la adivinaron: Es El Cóndor, de comienzos de los '50.
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Los colores de esta empresa eran: cuerpo rojo, techo azul, separado por una franja perimetral negra, y con algunos vivos en color crema sobre la cartelera y en este en el chapón embellecedor de la rueda trasera. Por lo que recuerdo los primeros coches llegaron usados desde Bs. Aires ya con estos colores, de hecho creo haber visto fotos de un restaurado porteño con esos mismos colores.
El letrero estaba pintado con fondo amrarillo y letras negras, y se mantuvo por bastante tiempo así, hasta la llegada de los Bedford que ya tenían el fondo blanco. A decir verdad no se veía mucho ni el número ni las letras, pero la gente lo distinguía por que decía "Ahí viene el amarillo". La bota de Santa Fe en los paneles nació con la empresa y también se dejó de utilizar con la venida de los Bedford.
En la foto está posando primero a la izquierda, mi amigo Primo Bagattin, que además de tener coche en la Linea 16, era mecánico y aquí habían salido a hablandar el motor y de paso sacar a pasear a la familia y amigos, como se estilaba antes, lo mismo que utilizar el cole cuando descanzaba un domingo para irse de picnic con la familia, los vecinos y todos los amigos que entraran en el bondi.
A decir de mi amigo el Gallego Díaz, el cole era uno más de la familia.
Hermes Airaudo, tenía también un Chevrolet 46, el coche 12.
Creo que esta foto fue sacado después que le cambiaran el motor naftero por un Perkins, cosa que fue muy común en los Chevrolet por la economía de combustible.
Primo Bagatin me comentaba que estos motores eran buenos pero que en el invierno lo que tenían bombas inyectoras rotativas a veces los hacían parir para que arranquen.
Les comento que cuando estaba en coronarias, después del infarto, me realizan unos estudios y encuentran que tenía el 98% de obstrucción en las arterias del corazón. Por lo que me pasan a una sala común para esperar (dos meses) por una operación, la que se lleva a cabo el 13 de mayo, donde realizan tres baypass. El 19 de mayo me dan el alta y hoy 5 de diciembre ya estoy recuperado y haciéndole caso a los médicos.
Nuevamente les doy las gracias a todos por preocuparse por mi.