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Otro interesante producto mendocino (V)
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Esta casa rodante con este aspecto tan raro como interesante es un producto de Carrocerías Corsino, fabricado en 1972 sobre un chasis Chevrolet C-50. Es muy probable que haya trabajado cuando nuevo en alguna de las empresas en las que esta familia tenía intereses, como Antártida o El Trapiche, por nombrar dos. Estas son solo conjeturas, porque el dato justo no se sabe.
Entre 1984 y 1985 fue transformado en casa rodante. Uno de los amigos de este espacio tuvo una actuación relevante en su conversión, así que quedamos a la espera de su relato para completar la historia de este modelo tan poco visto.
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Fue éste mi primer diseño de carrocería -casa rodante, en este caso- que hice, más allá de mi tesis de graduación, la cual estaba elaborando a la par, sobre el tema "ómnibus urbano".
Mi primo me pidió que le diseñara el exterior de la carrocería. La distribución del mobiliario él la tenía más o menos elaborada y en eso no intervine, allí le pijoteó mucho....Donde sí me dí el gusto de diseñar fue en la parte externa del del coche. Fíjense el cristal panorámico que le coloqué en la puerta del conductor. Asimismo, en el techo le coloqué una elevación aerodinámica que cubre un espacio para llevar bultos y, además, el tanque de agua. Lo más revolucionario fue el diseño gráfico que le proyecté, era un paisaje sin solución de continuidad, que recorría todas las caras del vehículo. Mi primo lamentablemente nunca terminó esa casa rodante y antes la vendió. La imagen que se observa es de quien la tuvo después.
Cuando proyecté ese motor home, estaba apenas a pasos de graduarme en la universidad. Reconozco que, entonces, fue un ejercicio interesante y también un desafío profesional que me brindó nuevas posibilidades y, como tal, asumí.