Carrocerías Colón - Su Historia Completa (¿1950? - ¿1967?)

Hacia 1950, no nos consta la fecha exacta, el Señor Antonio Hracek fundó un taller de reparación de chapa y pintura, para atender vehículos de transporte masivo de pasajeros. No hizo falta mucho vuelo imaginativo para elegir su nombre: lo bautizó Colón, por estar situado en la calle homónima, en la localidad de Ramos Mejía, en la zona oeste del Gran Buenos Aires. Varias carroceras fueron bautizadas según este criterio y heredaron el nombre de la calle en la cual fueron creadas.

Logotipo de la carrocera, donde consta su dirección y su isologotipo, una carabela con las velas al viento sobre un mar encrespado. (Gentileza Olga Hracek).

A poco de iniciar las actividades, ya contaba con un buen volumen de trabajo. Reparaban carrocerías de todo tipo y edad y, con el tiempo, muchos transportistas de la zona le confiaron a Colón la atención de sus unidades.

El fundador de Carrocerías Colón, Antonio Hracek, posa junto a un micro de turismo en el interior de la carrocera. Como se aprecia, por la gran cantidad de vehículos que se alcanzan a ver, en los primeros tiempos el trabajo no faltaba, felizmente. (Foto: gentileza Olga Hracek).

Poco después Miroslav Hracek, hijo de Antonio, tomó el mando del taller. Le imprimió otra dinámica de trabajo y tuvo objetivos más ambiciosos que su papá: fabricar carrocerías cero kilómetro, cosa que habría resuelto realizar a mediados de la década de 1950.

En este punto, la génesis de la carrocera propiamente dicha, se nos presenta un punto oscuro: no sabemos a ciencia cierta cual fue el primer modelo diseñado. Si bien los más antiguos que conocemos podrían haber sido los primeros cero kilómetro de Colón, realmente no nos consta de que no haya existido un modelo anterior que haya escapado a nuestros esfuerzos por identificarlo. Tal vez, algún día, sepamos si en realidad hubo un antecesor del producto al cual nosotros consideramos el inicial.

Primer modelo (¿1956/57? - ¿1959/60?)

Aún no tenemos clara la fecha en la que Colón comenzó sus actividades como carrocera hecha y derecha, pero podemos sospecharla gracias al styling de este modelo, pues es una copia casi exacta del que la reconocida firma La Estrella lanzó al mercado entre 1955 y 1956. Le damos a Colón un changüí de un año, hasta que lo hayan descubierto, diseñado sus planos propios y comenzado a fabricar.

El copiado fue muy aproximado a excepción de su frente, en el cual encontramos ciertas similitudes con el diseñado por la firma El Cóndor para sus productos a inicios de la década de 1950: la bandera luminosa de destinos es una réplica casi exacta y el formato del conjunto parabrisas - ventiletes tiene cierto parentesco, aunque realmente no es una copia fiel.

Estas fotos invitan al acertijo: ¿cual es cual? La primera imagen nos muestra un ejemplar del primer modelo de Colón, perteneciente a la desaparecida empresa San Bosco, prestataria de la línea provincial 224 (hoy 174) y la siguiente un coche de la señera empresa Micro Omnibus Quilmes carrozado por La Estrella, modelo elegido por la gente de Colón para inspirarse y diseñar el propio. (Fotos: Carrocería Colón: Gentileza Olga Hracek - Carrocería La Estrella: autor desconocido, colección Sergio Paratore).

Estas imágenes, tomadas de 3/4 perfil, nos revelan el aire familiar que tuvieron los frentes de El Cóndor y Colón. Podemos apreciar que el diseño de la bandera luminosa de destinos es idéntico entre ambos modelos, como así también las formas básicas del vano que abarca el conjunto parabrisas + ventiletes. Pero, en este último caso, ambos conjuntos fueron resueltos de diferente manera. (Fotos: Carrocería Colón: Gentileza Olga Hracek - Carrocería El Cóndor: Archivo C.E.A.P.).

Este modelo no se fabricó en grandes cantidades y fue poco conocido en general, aunque fue muy usual de ver en líneas como la 224 provincial (la desaparecida empresa San Bosco y, en menor escala, en Transportes Colectivos La Cabaña, empresas del oeste bonaerense que, con el correr del tiempo, se convirtieron en buenas clientas de Carrocerías Colón.

Hasta este momento, conocemos unidades que fueron carrozadas únicamente sobre chasis Mercedes Benz, en dos tamaños diferentes, con 3 ó 4 ventanillas por lateral. Aunque esto no quiere decir que no hayan existido coches de este modelo fabricados sobre otros chasis, que por ahora no hemos logrado registrar.

Segundo modelo, primera versión (¿1960? - ¿1962?)

Extrañamente, Colón renovó su modelo a la par de su musa inspiradora, carrocerías La Estrella: al poco tiempo de la salida al mercado del modelo más conocido de La Estrella, aquel del alerito parasol en su culata, Colón restilizó sus productos a su imagen y semejanza, a excepción de su frente (se mantuvo el diseño anterior) y ciertos detalles de laterales y culata.

Como se ve en esta foto de otro coche de la empresa San Bosco, en este caso correspondiente al segundo modelo fabricado por Colón, el frente difiere en muy poco de la versión anterior. Si comparamos las fotos, podemos tener la impresión de que aparentan ser más diferentes de lo que en realidad son, pero hay que tener en cuenta que este coche posee parasol y el otro no. (Foto: Gentileza Olga Hracek).

Si observamos las dos fotos que aparecen a continuación, podemos comparar el nuevo producto de Colón con un contemporáneo fabricado por La Estrella (en este caso, un coche de inicios de la década de 1960 perteneciente a la empresa Mariano Moreno, prestataria de la línea 236 -hoy 36-).

(Fotos: Carrocerías Colón: Gentileza Olga Hracek - Carrocerías La Estrella: autor desconocido, colección Alejandro Scartaccini).

Podemos ver que, si bien los rasgos morfológicos principales son idénticos, hay algunas diferencias apreciables, como el chapón embellecedor que adorna el lateral sobre la rueda trasera (el de La Estrella es muy especial y característico, una marca registrada en sus productos, mientras el de Colón se asemeja al que por aquellos años utilizaba la firma Luna); en la culata nos encontramos con que el alero de La Estrella es mucho más prominente y la luneta central algo más grande que la de su primo hermano, que además la presenta dividida en dos paños. No obstante, cabe aclarar que conocemos unidades en las que la luneta era enteriza, sin dividir.

No hay que tomar en cuenta otras diferencias visibles, como la franja que en el modelo de Colón baja en V, porque éste no fue un rasgo distintivo de este modelo: se hacía a pedido, tal cual las costumbres de otras carroceras como F.A.C. o Cooperativa San Martín, por ejemplo.

En este caso, también hubo modelos con 3 ó 4 ventanillas en sus laterales, de acuerdo al largo de su chasis. También registramos algunos coches carrozados sobre chasis Bedford.

Este modelo fue muy visto en las mismas empresas que fueron buenas compradoras del modelo anterior (San Bosco y La Cabaña) y en otras que se sumaron a la cartera de clientes, de entre las cuales sobresalen la empresa Teniente General Roca (línea 21) y Micro Omnibus Doscientos Ocho (línea 208, hoy 28).

Segundo modelo, segunda versión (¿1962? - ¿1964?)

Poco después, se emprolijó el diseño de modelo anterior mediante la reformulación de su frente, con el "coco" más redondeado (con el consiguiente rediseño de la bandera luminosa de destinos, que si bien conservó sus formas lució algo más armónica que la anterior) y la inclusión de ventiletes para el chofer de mayor tamaño.

En esta toma de otro de los convidados de piedra de esta nota (los coches de la desaparecida empresa San Bosco) es bien notorio el ventilete para el conductor, que luce renovado. (Foto: publicación desconocida).

Además, se rediseñaron las puertas, que incluyeron un segundo juego de superficies vidriadas en la parte inferior y aumentó levemente su tamaño, para alinear su extremo superior con el de las ventanillas (el de la versión anterior continuaba la línea del vano del parabrisas). También la luneta trasera fue levemente ampliada, para no desentonar con el resto del conjunto.

Este Bedford de la empresa Mariano Moreno, por entonces prestataria de la línea 223 (actual 133) nos revela buena parte de las modificaciones realizadas en esta versión. Bien se aprecian la bandera luminosa redondeada, el ventilete del conductor y la puerta rediseñada. Además, se adivina la luneta de mayor tamaño, si la observamos a trasluz dentro del salón y la comparamos con la del modelo anterior. (Foto: autor desconocido. Colección Aldo M. Daneri).

Podemos afirmar que esta variante fue la más vista en las calles y es el último modelo de Colón que tenemos bien individualizado y documentado, pero la historia continuó y éste es el momento en el que entra en un cono de sombra y escapa a nuestros esfuerzos por descubrirla.

Sus últimos y desconocidos tiempos (¿1964? - ¿1969?)

Esta nota tiene su génesis en un encuentro que hizo posible la pequeña mención a Carrocerías Colón que publicamos en una de nuestrs primeras notas, llamada Las carroceras menos conocidas. Gracias a esa pequeña reseñita, cuyo tamaño apenas pasaba de un recuadro, se contactó con nosotros Olga Hracek, Hija de Miroslav y nieta de Antonio, que ofreció datos y material para hacer posible la confección de esta nota, varias veces superior al escueto recuadrito que antes ofrecimos.

Pero, junto a la gran cantidad de fotos e información aportada, Olga nos dejó una incógnita enorme porque, pese a que no conocemos modelos de Colón posteriores al último reseñado, nos manifestó que la carrocera continuó sus actividades hasta fines de la década de 1960.

Si bien pudo haberse dedicado a reparar unidades existentes, nos manifestó que recuerda, cuando niña, que jugaba en el taller, entre las estructuras de unidades a medio fabricar y, por su edad, sus recuerdos no pueden ser anteriores a 1965. Ergo: Colón debe haber fabricado algún otro modelo, tal vez otra evolución de los aquí reseñados, de 1964 en adelante.

Tal vez su cantidad haya sido muy pequeña y, hasta ahora, han escapado a nuestros esfuerzos por identificarlos. Otra hipótesis que cabe nace de las declaraciones de Olga, que nos ha contado que la firma también se dedicó a fabricar casas rodantes, sobre todo de la mitad de la década de 1960 en adelante. ¿Aquellas estructuras habrán sido colectivos? ¿O casas rodantes, tal vez? Hasta ahora, no hay manera de saberlo.

Lo que sí se sabe es que, a fines de la década de 1960, la firma Colón dejó su lugar a a una nueva empresa del mismo dueño, Miroslav Hracek, llamada Colosal S.C.A. (e.f.), cuyo objetivo principal fue fabricar casas rodantes.

Isologotipo de Carrocerías Colosal, que nos deja otra gran incógnita: declara fabricar carrocerías, casas rodantes y afines. Hasta el momento, no hemos conocido colectivo alguno carrozado por esta firma, pero el dibujo incluido en el isologo nos invita a comenzar a investigar. (Gentileza Olga Hracek).

Esta nueva firma, de la cual no conocemos imagen alguna de sus productos, tuvo breve vida, porque el descalabro económico de 1975 (el tan mentado Rodrigazo pergeñado por el Ministro de Economía Celestino Rodrigo durante el gobierno de María Estela Martínez de Perón) pulverizó las finanzas de la joven empresa y, de manera forzosa, debió cerrar sus puertas.

Todo proyecto de reapertura quedó en la nada en 1979, debido al fallecimiento de Miroslav Hracek, el gran impulsor de este emprendimiento familiar.

Los últimos testimonios vivos

Hacia mediados de la década de 1970, ya no quedaba casi ningún Colón en servicio regular. Muchos habían pasado a desempeñarse como transportes de escolares, transformados en furgón o adquiridos por empresas del conurbano de segundo o tercer orden.

Con los años, por el lógico recambio de unidades aún en los servicios secundarios y en los de transporte escolar, tampoco quedaron sobrevivientes en ese tipo de prestaciones. Los últimos que conocimos quedaron relegados al transporte de carga o a la función de casa rodante.

Hacia mediados de la década de 1990 registramos dos ejemplares de la primera versión del segundo modelo en pie. Uno se encontraba en la localidad de La Plata y oficiaba de furgón y el otro fue visto en la ciudad de Buenos Aires oficiando de casa móvil, pero no conocemos la real filiación de esa unidad.

El furgoncito de reparto fotografiado en La Plata, en 1993. (Foto: Alejandro Scartaccini).

Este fugaz y decaído ejemplar, fotografiado en el Parque Los Andes hacia 1995, es la casa rodante a la que hacemos mención. Tras la toma de esta fotografía, nunca más lo volvimos a ver. (Foto: Gabriel F. Chiacchio).

Hoy, no nos consta la existencia de algún viejo Colón en pie. Si aún subsiste alguno, está bien oculto y a resguardo de cualquier indiscreción de nuestra parte, a la par de los últimos tiempos de esta poco conocida carrocera, que hasta ahora son un misterio que, por supuesto, intentaremos revelar.

Alejandro Scartaccini

Noviembre de 2008.

De corazón agradecemos a Olga Hracek, la importantísima cesión de datos y fotos que hicieron posible la confección de esta reseña.