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El día después de los trolebuses mendocinos
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Se sabe que el sistema de trolebuses de la capital mendocina no funciona. Fue sustituido por ómnibus, debido a las deficiencias que tenía debido a la falta de coches en condiciones de circular.
Esta imagen fue obtenida en uno de los garages de la disuelta Empresa Provincial de Transportes de Mendoza, la tan conocida EPTM que fue transformada en Sociedad Anónima.
Vemos a dos trolebuses New Flyer descansando ¿eternamente? en el playón, junto a un ómnibus Materfer que solía reforzar las líneas de trolebuses cuando debían cubrir servicios por la defección de las unidades titulares.
Esperemos que el sistema de "troles" vuelva a resurgir, pero hoy día esto parece una utopía.
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Lo que dice la realidad, es que desde hace un par de meses, cuando se sacaron todos los trolebuses de modo provisorio del sistema, los ómnibus que los reemplazan brindan un servicio sumamente ágil, no son un estorbo ni un karma para la ciudad. Esto lo valoramos especialmente quienes somos automovilistas y padecemos a diario lo que es circular detrás de un trolebús.
Honestamente, debo decirte que si yo hoy tuviera que movilizarme en ómnibus o trolebús diariamente, no podría realizar más de la mitad de mis actividades profesionales y académicas que llevo a cabo en lugares diametralmente opuestos del Gran Mendoza, en gran parte con pocos minutos de diferencia entre ellas.
El espacio público es de y para todos y a todos le tenemos que brindar las soluciones adecuadas. Por suerte o por desgracia, no somos Oslo, ni París ni Madrid sino un país en vías de desarrollo que trata de sobrevivir y desarrollarse como puede, con sus limitados recursos. Estuve en Madrid hace unos meses y el valor del pasaje urbano ni se parece al que se paga en Mendoza que es de unos $8,00, si mal no recuerdo, así cualquiera brinda un eficaz y eficiente servicio de transporte urbano. Aquí se comerían vivos a los empresarios del transporte con una tarifa como la que pude ver se paga en Madrid y en Barcelona.
Por ahí creo que los menducos somos una raza muy particular que nos encanta la individualidad y no compartir lo colectivo, ja, ja, ja..!!!
Pero quedate tranquilo, Carmelo. Apenas las cosas se salgan de cauce estaré aquí para enderezar todo en dos minutos. Podemos ser un poco apasionados en nuestros comentarios y dejarnos llevar por los impulsos, pero apenas las cosas se desmadren se pondrá orden enseguida. Confío en que no llegaremos a ese punto.
Pegaso) Saludos.